Todo para atrás y ahora cada día más rápido

Tal como lo sostuvimos desde el día uno, este modelo no tiene chances de resolver ninguno de los problemas socioeconómicos de la argentina sino agravarlos. Todo para atrás y más rápido.

Cuatro crisis

La crisis social sigue profundizándose, la economía continúa cayendo ya por dos trimestres consecutivos, el consumo doméstico sigue por el piso, la capacidad instalada en la industria cae por 8 meses consecutivos.

Se consolida la peor distribución del ingreso desde el año 2016, la pobreza bien medida alcanza el 50% y sin considerar en la valorización de la línea de pobreza el costo del alquiler.

La inflación que estimada por un IPC obsoleto del año 2005 ya muestra signos a la suba, a tal punto que el anticipo de inflación mayorista alcanzó el 3,1% en el mes de agosto.

El desempleo en alza: entre noviembre y junio solamente, ya se destruyeron 236.139 puestos de trabajo formales y el último informe de Indicadores Industriales y Expectativas de la UIA señaló que «El desempleo se ubicó por encima de la disminución de turnos en julio, lo que sugiere que las empresas comienzan a avanzar con recortes de puestos de trabajo frente a la caída de la demanda y de la producción, de acuerdo con un informe del Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina. Se trata del peor balance registrado en un año y medio, en abril de 2024.

 “En julio aumentó la cantidad de empresas que redujeron su nivel de empleo” comparado con el informe anterior realizado en mayo y también respecto de julio del año pasado. “Es el máximo nivel de proporción de empresas con caída en la serie, casi igualando el valor de abril de 2024; por primera vez en los últimos cuatro relevamientos, la reducción de personal (19,4%) se ubicó por encima de la disminución de turnos, lo que sugiere que las empresas comienzan a avanzar hacia recortes de empleo como siguiente instancia de adaptación”, señaló la UIA.

En julio, el 36,3% de las empresas redujo su producción respecto al promedio del segundo trimestre del año, frente a un 21,8% registró incrementos. En ventas, el 43,5% reportó bajas y solo el 18,6% subas. En exportaciones, las caídas alcanzaron al 30,5% de las empresas, mientras que las alzas llegaron al 16,6%, reduciéndose la brecha respecto del relevamiento anterior.

En empleo, el 24,4% de las firmas redujo su dotación de personal, alcanzando el nivel más alto de la serie (similar al de abril de 2024). Además, las compañías que implementaron recortes de personal alcanzó el 19,4%, una cifra que creció durante los últimos cuatro relevamientos, mientras que las empresas que ajustaron turnos llegó al 18,9%.

La caída de la demanda interna se ubicó como la principal preocupación empresarial (40,1%), principalmente la vinculada a otras industrias (22,5%), correspondiendo el 17,6% a la demanda de los hogares. En segundo lugar se ubicó el aumento de costos (21,4%), con el laboral como principal factor, seguido por las dificultades para competir con productos importados (19%).

 

 

En cuanto a las expectativas, se moderó el optimismo hacia el futuro, con una menor proporción de empresas que prevé mejoras en su situación económica empresarial (48,6% vs 57,8% en el relevamiento anterior), en su sector de actividad (46,4% vs 52,2%) y a nivel país (53,1% vs 64,3%). Apenas el 39,6% de las empresas tuvo necesidad de un crédito bancario, pero el 42,8% no accedió al monto requerido.»

La caída del poder adquisitivo de salarios, jubilaciones y pensiones, un 20% por debajo en promedio del poder adquisitivo del año 2023, que ya era desastroso después del 30% de caída real acumulado en los gobiernos de Macri y Fernández.

No termina acá la malaria de Javier Gerardo y su banda.

Se ha sumado a esta mega crisis social la crisis financiera que tanto preocupaba al gobierno, con un riesgo país camino a superar los 1500 puntos básicos, el dólar pulverizando la banda superior – la inferior ya se exhibe en el museo de ciencias naturales junto a la estrella de mar culona-, en fin, el mercado como lo señalara el emblemático Chavo ya “se le chispoteó” al especialista en crecimiento sin plata.

Pero a esta crisis financiera se adicionó la crisis parlamentaria y el rechazo sistemático de los vetos enviados por el ejecutivo, incluso por gente de su propia tropa libertaria y los simpáticos radicales con peluca.

Si por esto fuera poco, también ha llegado la crisis electoral a las filas del señor gordo Dan, al que le mandamos un saludo.

En efecto, la imposibilidad de armar la alianza de ultraderecha con sectores del PRO, habiendo destratado al buenazo del ingeniero Mauricio, sumado al impacto del ajuste sobre su electorado original de segmentos medios bajos y bajos (ese 30% que le permitiera ingresar a ballotage) hizo que con apenas 260.000 votos más que en el año 2021 (la peor elección de medio término del peronismo desde 1983), el oficialismo nacional sufriera un durísima derrota en las elecciones provinciales de Buenos Aires.

Derrota inapelable que anticipa una derrota similar en las nacionales de octubre y probablemente ya no solo en la provincia que pilotea Axel Kicillof, sino en todo el país.

Territorio nacional donde, antes de esta debacle, del total de ocho elecciones realizadas, el oficialismo solo ganó una en CABA y la segunda en Chaco, pero camuflado bajo el ropaje del radical piloso Zdero que, seguramente, partirá a la brevedad de la nave libertaria.

Esta tormenta perfecta se descarga además sobre un presidente y equipo ya con ningún recurso narrativo que puedan poner en juego sin despertar más descontento, un estilo extorsivo que se observa a cielo abierto, corrupción generalizada y como vimos (muy pocos) en la última cadena nacional ensayando ahora una “mueca de normalidad” seguramente extraída del manual DSMV, que “no le sale” al señor Javo.

Tiene sí un punto a favor el gobierno: Ser un enclave regional de la política exterior desplegada por Trump, en esta etapa de disputa por la hegemonía con otras potencias emergentes, en particular China, y serlo con un nivel de servilismo sin antecedentes.

Tan lacayo resulta este gobierno que no solo entrega nuestra soberanía económica, recursos naturales incluidos, sino que es tan moralmente abyecto, que reivindica el genocidio que está perpetrando el estado sionista israelí sobre el pueblo palestino, que hoy recibe la condena internacional casi sin excepciones.

En suma, vivimos una pesadilla que esperemos tenga fin el 10 de diciembre de 2027.

Un comentario

  1. Traducción libre.

    eh, eh, eh … vamos a defender el techo … eh, eh, de la banda, eh, eh, eh … porque el programa, eh, eh … fue diseñado así, eh, eh, eh, … y va haber dólares para todos, eh, eh, eh, … y vamos a vender hasta el último dólar, eh, eh, eh … porque el banco central eh, eh, tiene dólares para todos, eh, eh, eh …

    Palabra de ministro.

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