El deterioro en la salud mental no resulta solamente un padecimiento del orden de la subjetividad, que lo es, sino que , ya tan solo por su extensión, produce efectos diversos, por caso político-electorales. Un estudio de la Facultad de Psicología de la UBA muestra que 1 cada 10 argentinos tras la pandemia y la crisis sucesiva, está en riesgo de tener un trastorno. Esta variable de padecimiento subjetivo , que lo es, por su extensión y profundidad creciente, no debe ser desplazada a la hora de explicar también junto a las problemáticas estructurales , el sistema de preferencias político- electorales y tipo de liderazgo que emerge en una sociedad rota.