El golpe de Estado militar en Níger es el último episodio de una cadena que ha ido agravando la situación política, económica y de seguridad en el África Occidental, en la que pesan la historia colonizadora europea y los procesos de independencia, los ricos recursos que atesoran sus países, muchos intereses extranjeros en pugna y las dinámicas locales, que incluyen la acción de grupos yihadistas.
Los BRICS han surgido como una poderosa alianza de economías de mercados emergentes a lo largo del siglo XXI. Compuesto por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, como alude su acrónimo, incluye tanto asimetrías como diversidad en cuanto a sistemas económicos. Las crecientes tensiones geopolíticas con Rusia y China por parte de Occidente han proyectado tanto amenazas como progreso a este grupo países.
Ahora que está de moda recibir la visita del embajador estadounidense, repasemos en concreto la amplitud de los acuerdos que nos propone el país del Norte, a través de su organismo de política exterior predilecto el FMI, el gran “prestamista de última instancia” durante la vieja hegemonía planetaria estadounidense.