El fascismo es una herramienta del capitalismo en crisis que opera bajo el precepto cognitivo y político de una permanente contradicción, aspecto que aparece nítidamente si pensamos en el gobierno del presidente Milei: un aparato de Estado ubicado en el corazón de la estatalidad para destruir el Estado social.
El gobierno de la Libertad Avanza se propuso privatizar a las empresas públicas desde el inicio de su gestión. Primero lo intentó con el mega DNU 70/23 donde, entre sus más de 600 artículos, incluyó a 41 empresas como YPF, ARSAT, el Banco Nación, Nucleoeléctrica Argentina S.A. que tiene a cargo las centrales nucleares, Energía Argentina (ex – ENARSA), Aguas Argentinas, Innovaciones Tecnológicas Agropecuarias S.A., el Correo Argentino, Aerolíneas Argentinas, Fabricaciones Militares, la Fábrica Argentina de Aviones “Brigadier San Martin”, Empresas ferroviarias, un astillero, Vehículo Espacial Nueva Generación S.A (VENG), EDUCAR, S.A., las empresas del Sistema de Medios Públicos, por solo nombrar algunas de ellas.
Ofer Cassif, actualmente suspendido de la Knesset por oponerse al genocidio en Gaza, analiza el descenso de Israel al fascismo, la construcción del movimiento que puede derrotar a Netanyahu y por qué nunca abandonará la lucha por la libertad palestina.